Celebración del 2 de Noviembre
Celebración del 2 de Noviembre
En el amanecer de luces bellas que nuestro Creador nos da en este día 2 de Noviembre, en él que recordamos en especial a nuestros seres queridos que por nuestra fe creemos que viven en el Reino de Dios. Celebramos a nuestras madres (hermanas), que son pilares, cimiento, engranes, granitos de arena que han formado nuestra muy amada Congregación de Religiosas Franciscanas de Nuestra Señora del Refugio.
Dimos principio a las 12:30 Hrs. Con la Celebración de la Eucaristía presidida por el Padre Fray Evencio Herrera O.F.M. que con emotivas palabras nos dice: que hermoso celebrar a nuestras hermanas, que importante recordar a las que conocí como Madre Rosalía, cuando ustedes eran postulantes, novicias. No podemos saber todo lo que tuvieron que luchar a brazo partido por hacer la voluntad de Dios. No debemos juzgar la juventud, debemos escucharles; Dios nos pide amar al prójimo, la única pregunta que nos hará: estuve enfermo…tuve sed y … Cuál es más importante ¿amar a Dios o al prójimo? No podemos separarlas las dos son importantes pues una va ligada con la otra y viceversa. Ustedes por eso luchan, por eso no se casaron. Vengan a mí, al banquete que les he preparado. En la Familia Franciscana no hay nada que temer entrégate el 100, desde aquí vamos a gozar de Dios, hay que entregarse a Dios en plenitud: en los pobres, los marginados, necesitados, enfermos, madres solteras, niños… Cada una responda. Qué me falta para vivir lo que Dios me está pidiendo: Amar a Dios y a mis Semejantes, Vivir las Obras de Misericordia.
Termino su homilía invitando a todos a cantar “SOLO DIOS HACE AL HOMBRE FELIZ”.
Terminada la Eucaristía se prosiguió con una peregrinación encabezada por el Padre Fray Evencio quien incensó los pergaminos donde se encuentran escritos los nombres y fechas del mes en que murió la hermana y los altares por los pasillos decorados bella y exquisitamente por las hermanas como podemos apreciar en las fotografías. Terminado el recorrido proseguimos con una exquisita taquiza que se disfrutó no sólo el gusto del sabroso alimento, sino sobre todo la alegría de compartir y convivir.
Continuamos nuestra Celebración en el Salón de Actos en donde nuestras hermanas dejaron ver la alegría que trae consigo un corazón lleno de amor y de paz. Madre Rocío Gómez González vestida con nuestro Primer Hábito que usaran nuestras madres dio inicio con sentidas y elocuentes palabras siguiendo con cantos con sencillas representaciones y emotivas poesías.
Terminamos con un Café Literario en memoria de Nuestras hermanas que han partido a la Patria Eterna, recordándolas con cariño y agradecimiento por su amor, entrega, legado espiritual que nos dejaron. Habiéndose deleitado nuestras hermanas con un exquisito café y la lectura variada de nuestro acervo congregacional, compartieron entre ellas en cada mesa, En seguida pasaron varias hermanas que con emoción hablaron de los recuerdos de la vida, actividades, sucesos, obras, ejemplos…No podemos negar desde Nuestra Madre Libradita, una a una hasta la Hna. Esthela, última que partió al encuentro del Amado, Jesús nuestro Dios y Señor, cuanto amor, cuanto testimonio, grandes ejemplos a seguir. Sí ellas y tantos santos pudieron por qué tú y yo no. ¡Empecemos hermanas, que hasta hoy nada hemos hecho!
Terminamos nuestra Celebración con las Palabras de Ntra. Madre…
Y su Bendición.